Equigoma incorpora a su catálogo las nuevas bandas transportadoras de PVC: versatilidad, resistencia, higiene y eficiencia al servicio de la industria.
En Equigoma seguimos apostando por la innovación y la calidad en soluciones de transporte industrial. Por ello, incorporamos a nuestro catálogo las bandas transportadoras de PVC, un producto diseñado para mejorar la eficiencia, la higiene y la durabilidad en múltiples sectores productivos.
Las bandas transportadoras de PVC se han consolidado como una de las opciones más demandadas en la industria gracias a su resistencia mecánica, su versatilidad y su excelente relación coste-beneficio. El modelo verde que presentamos no solo aporta fiabilidad en el trabajo diario, sino que también ofrece un valor añadido en procesos donde la inspección visual y la seguridad son aspectos prioritarios.
Fabricadas con PVC de alta calidad y refuerzo textil de poliéster, estas bandas combinan resistencia al desgaste con una gran flexibilidad, lo que les permite adaptarse tanto a sistemas rectos como inclinados o curvos, incluso en transportadores con poleas de diámetro reducido. A esto se suma su superficie lisa y no porosa, que facilita la limpieza y asegura un mantenimiento sencillo, un punto clave en sectores donde la higiene es fundamental.
Entre sus aplicaciones más habituales se encuentran el transporte de panadería, bollería, galletas y productos alimentarios envasados, así como su uso en centros de distribución y almacenes para el movimiento de paquetes. También son muy utilizadas en líneas de montaje de plásticos, textiles, electrónica y otros productos de consumo, y en sistemas de embalaje y empaquetado.
Con esta nueva incorporación, en Equigoma reafirmamos nuestro compromiso de ofrecer soluciones adaptadas a las necesidades de cada cliente. Sabemos que cada proceso productivo es diferente, por eso acompañamos a las empresas con un asesoramiento técnico especializado y con productos diseñados para aportar eficiencia, seguridad y durabilidad.
Las bandas transportadoras de PVC son mucho más que un componente industrial: son una herramienta que ayuda a optimizar procesos, reducir costes de mantenimiento y mejorar la productividad.